En el rostro: Limpia tu piel con agua y un limpiador suave. Aplica una pequeña cantidad de la crema sobre el rostro y masajea suavemente en movimientos circulares hasta su completa absorción.
En el cuerpo: Después del baño, aplica la crema en las zonas secas o ásperas, como codos, rodillas y talones. Masajea hasta que la piel la absorba completamente.
En las manos: Usa una pequeña cantidad en las manos y masajea especialmente en las áreas más resecas. Para mejores resultados, aplícala por la mañana y antes de dormir.
Para obtener un efecto óptimo, úsala dos veces al día, por la mañana y por la noche, como parte de tu rutina de cuidado de la piel.